CT4AWE es un lugar de encuentro de personas que en su práctica clínica diaria aplican tecnologías de información y comunicación con el fin de mejorar la calidad de la vida de personas mayores. La cuestión clave es prevenir las enfermedades de las personas mayores, subrayar la importancia de su independencia dentro de la sociedad, también en el contexto de la actividad profesional. ICT4AWE favorece el intercambio de informaciones y la divulgación de las mejores prácticas, innovaciones y mejoras técnicas en el ámbito de la asistencia sanitaria. La conferencia de este año ha reunido a participantes de más de 20 países. Al Instituto de Fisiología y Patología Auditiva lo representó la Sra. Weronika Świerniak.
La conferencia agrupó a especialistas y a las personas interesadas en las nuevas tecnologías de información y comunicación del campo de ageing well y de e-health. Durante la ICT4WE se abordaron cuatro temas principales relacionados con: el apoyo a las personas de tercera edad en sus quehaceres diarios proporcionado por su entorno más cercano, la telemedicina, la e-Salud y la vida independiente.
En el marco de cada uno de estos temas, se presentaron, entre otros, soluciones innovadoras y se señalaron los problemas que requieren una investigación más detallada y la regulación de las normas jurídicas. El discurso de apertura, pronunciado por Panagiotis D. Bamidis de Aristotle University of Thessaloniki, Greece & Leeds Institute of Medical Education, despertó un gran interés. El ponente trató de los asuntos relacionados con los peligros del Recomendation Health System, cada vez más popular. Lo que suscita mayores preocupaciones son las cuestiones de la privacidad, entre otros:
- las diferentes perspectivas de la privacidad de los usuarios,
- quién y con qué objetivo utiliza los datos de los usuarios,
- la actualidad de los datos relativos al usuario (si mi estado de salud actual concuerda con lo que escribí en el algoritmo hace 10 años, si el sistema va actualizando y adaptándose al cambio del estilo de vida y de los hábitos),
- sistemas de recomendación distribuidos, cifrado homomórfico.
Además, se discutieron los asuntos relacionados con ataques maliciosos (como: la falsificación de las preferencias utilizando usuarios falsos y la revelación de los datos del usuario mediante la obtención de las preferencias), como también a la cuestión de la responsabilidad. Se hizo referencia al ejemplo de la aplicación en la cual el paciente introduce sus síntomas de enfermedades y, a continuación, basándose en los algoritmos construidos por los ingenieros, obtiene el diagnóstico y la opción del tratamiento recomendada. Se hizo la pregunta: ¿Quién, en esta situación, será el responsable – por ejemplo – por la toma de una pastilla inadecuada? ¿El diseñador de los algoritmos?, ¿Los demás usuarios?, ¿El mismo usuario? Por eso, existe una gran necesidad de desarrollar regulaciones jurídicas adecuadas.
Durante ICT4AWE se presentaron diferentes dispositivos utilizados en la prestación de cuidados a personas de edad avanzada: dispositivos de soporte, proyectos de casas inteligentes y sistemas de asistencia a las personas mayores. Aquellos se emplean básicamente para mejorar la calidad de vida de las personas de edad avanzada y mantener su estado de salud. Un proyecto excepcional de la casa inteligente, TigerPlace, recurre al personal universitario y a estudiantes para que éstos vigilen a los ancianos y, por lo mismo, les garanticen la asistencia. La tecnología en la asistencia a personas mayores desempeña actualmente un papel cada vez más importante, y también se está haciendo cada vez más generalizada, lo cual favorece un dinámico desarrollo de este sector. Merecen atención especial los sistemas Health Buddy y AlereNet, útiles para la gestión del problema común entre las personas mayores, la insuficiencia cardíaca.
También se abordaron las cuestiones concernientes a la confianza de las personas mayores a las nuevas tecnologías relacionadas con la salud. El trabajo de la dra Wiktoria Wilkowska incluye las opiniones acerca de los factores que condicionan dicha confianza (fiabilidad, credibilidad, eficiencia y facilidad de uso), así como la importancia de las distintas funciones del sistema para los usuarios. Los rasgos del usuario, tales como la edad, el sexo y la percepción de la salud han sido considerados como los indicadores representativos de la diversidad entre los usuarios (potenciales). Los resultados demostraron una influencia significativa de la edad y del sexo en la confianza (se ha demostrado que desde el punto de vista estadístico, las mujeres de más de 65 años de edad usan y confían con más frecuencia en las nuevas tecnologías). Se subrayó la importancia de la diversidad del grupo de usuarios en las investigaciones apoyadas en confianza – en los sistemas médicos en el entorno familiar. Además, en cuanto a la aceptación de las tecnologías médicas, es de gran importancia darse cuenta por parte del paciente de su discapacidad, la recomendación del médico (siempre que el médico confíe en el sistema dado, el paciente también se pondrá a usarlo), así como la posibilidad de probar el dispositivo dado gratuitamente en casa. También se presta mucha atención a los robots que “tengan la cara”, ya que entonces el paciente tiene la sensación de que se comunica con otro ser humano.
Resumiendo, los resultados de los trabajos presentados durante la conferencia ICT4AWE 2018 indican que la mayoría de las personas mayores de 65 años no aceptan soluciones tipo smart, ya que se preocupan por sus datos personales debido a la falta de regulaciones jurídicas. Actualmente, el reto es encontrar la respuesta a la siguiente pregunta: ¿qué podemos hacer para hacerles más fácil aceptarlo? El consenso es que, al principio se debe introducir la asistencia mixta (que una elementos del cuidado estacionario y del cuidado que use las técnicas de telemedicina). No obstante, para que lo antedicho sea posible los médicos y cuidadores deberían proporcionarle al paciente toda la información posible sobre los nuevos sistemas y tecnologías usados en la asistencia sanitaria.